viernes, 19 de agosto de 2011







Hay pequeños gestos que dan a uno la felicidad. Más que eso, son como un pellizco para despertar, pero al revés. Para mostrarte que todo puede ir a mejor.

2 comentarios:

  1. Hola Patricia:
    Quería darte las gracias por hacerte seguidora de mi blog.
    Tienes un blog muy bonito y poético. Te felicito.

    ResponderEliminar